Informe. Balance de siniestralidad Semana Santa 2023
Tras la vuelta a la normalidad del año anterior, la Semana Santa de este año ha registrado cifras récord de movimientos de largo recorrido, que se han traducido en un incremento de la siniestralidad mortal en España y el freno a la reducción en el número de víctimas mortales que se había registrado en el primer trimestre.
27/04/2023
Aumento de la movilidad y de la siniestralidad vial
Superada la pandemia, la movilidad de las personas no solo ha vuelto a la normalidad, sino que parece haberse disparado. Si el pasado año ya se superaron los movimientos de 2019, este año la movilidad durante la Semana Santa ha sido incluso superior (16,4 millones de desplazamientos de largo recorrido, un 3,8% más que en 2022). Este fenómeno se ha traducido en un notable aumento de la siniestralidad respecto al mismo período del año pasado. Durante los 10 días y medio que se contabilizan como Semana Santa (31 de marzo a 10 de abril) se han registrado 28 siniestros mortales con 34 personas fallecidas, lo que significa 7 personas más que en 2021.
Hasta la Semana Santa, la siniestralidad mortal en carretera en España ha seguido una tendencia positiva, con reducciones notables de la siniestralidad en febrero y marzo respecto a los mismos meses del año pasado. De esta forma, el 31 de marzo habían muerto 225 personas en accidente de tráfico, un 10% menos que en 2022. Pero esta tendencia se ha roto de nuevo al inicio de la Semana Santa y durante los días pasados del mes de abril. El acumulado anual a 16 de abril presenta un total de 275 fallecidos, con lo que la diferencia se ha reducido ahora al -4% respecto a la misma fecha de 2022.
En Cataluña, durante el primer trimestre han fallecido 34 personas en 28 accidentes mortales en las vías interurbanas. El mismo número de accidentes, pero dos muertos más. Los registros de la Semana Santa y hasta el 16 de abril han hecho que Cataluña pasara a cifras negativas respecto del año pasado: 37 fallecidos, tres menos que el año anterior.
Conclusiones
En las conclusiones del informe, el RACC pone el foco en distintos puntos:
- La necesidad de incidir en el colectivo de motoristas (motos + ciclomotores), tanto en vías interurbanas como en urbanas.
- El incremento de víctimas mortales mayores de 55 años, con un elevado porcentaje de fallecidos que no usaban sistemas de retención.
- El incremento de víctimas que han muerto en carreteras convencionales, en comparación con los mismos datos del año anterior.
El RACC insiste en que son necesarias más medidas para poder alcanzar la meta de los 0 muertos en carretera en el año 2050. Recuerda medidas ya propuestas anteriormente, como un plan específico de seguridad para motociclistas, un acceso gradual al permiso de conducir, una revisión a fondo del proceso formativo… Así como nuevas inversiones en infraestructuras que mejoren la seguridad vial.
Ver datos detallados y conclusiones completas en la documentación adjunta.
