Estudio. Análisis de la funcionalidad de Vía Augusta con carril bici

El RACC ha analizado el funcionamiento y utilidad del carril bici de la Vía Augusta de Barcelona, nueve meses después de su finalización. Una de las conclusiones principales del estudio señala que, con esta infraestructura, el 20% del espacio de la Vía Augusta se destina actualmente a solo el 1% de los usuarios.

30/05/2024

Objetivos

El RACC ha analizado cómo se está comportando la Vía Augusta de Barcelona, uno de los ejes de acceso a la ciudad que en el mes de agosto completó las obras de construcción de dos carriles bici unidireccionales en todo su recorrido. El objetivo del Club ha sido evaluar si los cambios que han supuesto la implantación de este carril bici están contribuyendo a promover una movilidad limpia y segura.

Para realizar este estudio, el RACC ha analizado aforos en los 7 tramos en los que se ha dividido la vía, realizando más de 3.500 observaciones de los vehículos circulantes por el carril bici, entre las 7 y las 10 h. de la mañana y entre las 17 y las 20 h. de la tarde. También ha realizado observaciones para calcular el desempeño de los límites de velocidad de las bicicletas, la velocidad media de los buses, los ciclos semafóricos para atravesar los cruces principales y los comportamientos de los usuarios respecto al carril bici. También se han usado datos de Intensidad Media Diaria (IMD) del Open Data del Ajuntament de Barcelona; datos de Transports Metropolitans de Barcelona (TMB) sobre Víajeros en bus de 2023; cifras de velocidades medias de la herramienta de análisis de congestión de tráfico (INRIX); y datos de trabajos de campo realizados por el RACC expresamente para este estudio.

Reparto y uso del espacio de circulación

Conclusiones

Las conclusiones principales del estudio señalan lo siguiente:

  • Los nuevos tramos de carril bici en Vía Augusta han supuesto un incremento en la red ciclista (actualmente Vía Augusta cuenta con unos 4km y mayor conectividad en bicicleta hasta la Diagonal), pero ha modificado la funcionalidad de un eje/acceso de entrada y salida de la ciudad de Barcelona.
  • La congestión ha incrementado porque se ha disminuido más la capacidad que la intensidad del tráfico: circulan menos vehículos por un espacio mucho más reducido y la consecuencia es que tardan más tiempo y hacen más colas.
  • Considerando el conjunto de usuarios que circulan por Vía Augusta a lo largo del día, los usuarios del carril bici representan actualmente un 1% de la movilidad y tienen reservado entre un 20 y un 25% del espacio de circulación en los diferentes tramos.
  • El estudio presentado por el RACC ha observado problemas de convivencia entre los usuarios de diferentes medios de transporte.

Recomendaciones

A raíz de las conclusiones del estudio, el RACC plantea las siguientes recomendaciones a las administraciones responsables:

  • Analizar globalmente la red en arterias de acceso y salida a la ciudad antes de hacer cambios que afecten al empleo de la calzada y, por tanto, a su funcionalidad. Estudiado el análisis concreto de Vía Augusta, se debería evaluar a fondo las consecuencias derivadas del carril bici y la pérdida de capacidad vial y actuar en propuestas para mitigar sus efectos, tanto en transporte público como en vehículo privado.
  • El RACC plantea estudiar otros itinerarios ciclables por calles del entorno y sacar el actual carril bici en sentido mar / bajada, especialmente para reducir presión en el cruce Vía Augusta / Ronda General Mitre.