Tribuna RACC: «La reforma de la fiscalidad del automóvil, una palanca para la reactivación económica»

En el marco de una Tribuna RACC de la Movilidad, el RACC reclama una reforma estructural de los impuestos vinculados al automóvil para incentivar la demanda y reflotar el sector.

22/02/2012


Contexto

La demanda de automóviles en España se ha desplomado desde el año 2007, aumentando la antigüedad del parque, con los consiguientes efectos negativos sobre la seguridad vial y el medio ambiente.
 
La producción, gracias a un ajuste significativo y a las exportaciones, no se está desplomando al mismo ritmo y la industria del automóvil se está configurando como el principal motor económico de nuestro país.
 
En este contexto, la reforma de la fiscalidad del automóvil –una asignatura pendiente desde hace muchos años– se perfila como una herramienta clave para relanzar la demanda y apuntalar un sector que es estratégico para España.

Objetivos

Ante la situación actual, es necesaria una solución actual y permanente. Una reforma estructural de la fiscalidad del automóvil contribuirá de manera clara a dinamizar la economía a corto y medio plazo y a consolidar de manera permanente esta mejora. La reforma propuesta por el RACC se articula en tres grandes elementos:

  1. Supresión inmediata del impuesto de matriculación para relanzar la demanda.
  2. Afectación de los impuestos especiales para fomentar una movilidad más segura y sostenible.
  3. Supresión progresiva del impuesto de circulación en caso de aumentar los impuestos especiales sobre hidrocarburos. De este modo se gravaría más el uso y menos la posesión.

Conclusiones

La reforma de la fiscalidad que propone el RACC mejoraría de forma sustancial y estable la situación actual incidiendo en los siguientes aspectos:

  • Reduciría el número de figuras impositivas que gravan el automóvil, simplificando el sistema actual.
  • Gravaría más el uso y menos la posesión, lo que tendría un impacto favorable sobre el medio ambiente y la seguridad vial.
  • La supresión de los impuestos de matriculación y circulación dinamizaría la actividad económica y promovería que las ventas se situasen en un nivel de equilibrio.